La tecnología de los Pitidos
Para
los que hemos rebasado la edad de la juventud, la tecnología nos
sorprende cada día. Quizás porque nacimos en un momento en que los
avances tecnológicos caminaban despacio y cada paso era un
acontecimiento mundial. Hoy la ciencia y la técnica no dan pasos,
corren y apenas descubrimos algo nuevo, se hace viejo.
Un
día, mientras preparaba la comida en la cocina, siento un pitido
intermitente. Pensé de inmediato en un camión o un equipo de
construcción en retroceso pero no, se había quedado la nevera
abierta. Fue entonces que me puse a pensar que estamos en medio de
una ola de tecnología de los pitidos. El micro-ondas, la
vitro-cerámica, el
horno, la nevera, el ordenador, el teléfono, en fin, muchas cosas
pitando.
Antes
no pasaba eso. La cocina, no importaba que quedara encendida, tarde o
temprano te darías cuenta. La nevera, pues para que iba pitar si el
que la poseía la cuidaba como a un niño. El teléfono era el único
que pitaba si se quedaba descolgado y para eso de mala gana.
Si seguimos con estos avances tecnológicos, con avisos sonoros, llegará el momento
que los alimentos te avisaran, con un pitido, si está apto para
comer o
si están fríos o calientes. Me imagino llegar a una peletería y al
intentar probar un par de zapatos suene un pitido porque no es tu
talla o porque tus pies huelen mal.
De
todas formas estoy a favor de los pitidos pero me gustaría que
fueran diferentes, Al menos los ancianos, si no estamos sordos, nos
daríamos cuenta de que artefacto se trata.
Pedro
Celestino Fernández Arregui.