Paranormal
La humanidad desde sus remotos orígenes
siempre ha creído en el “más allá” apoyándose en las consecuencias de fenómenos
inexplicables. Algunos de esos fenómenos, según ha avanzado la ciencia, se han
descubiertos el porqué de muchos acontecimientos que se creían era producto de
hechos sobrenaturales y/o imaginación.
Hay millones de escritos que tratan sobre los
fenómenos paranormales y hay millones de personas que son capaces de contar
alguna “experiencia” sobre el tema.
Por ejemplo, en Inglaterra vive una viuda que
está muy pero muy asustada con los fenómenos que ocurren en su vivienda. Según
ella, todo comenzó después de la muerte de su marido cuando al poco tiempo pudo
apreciar una mancha en la pared que refleja el rostro de su difunto esposo. Más
tarde otra mancha, esta vez en el lavabo, con la figura de su perro fallecido.
Pero no todo queda en las manchas con
semejante a los rostros descritos, sino también, se descolgaban las puertas de
los armarios, los cajones se habrían solos, el pajarito que tenía encerrado se
le escapó porque “alguien” abrió la puerta de la jaula, sombras de un hombre
paseando por la casa,etc.
Todos estos sucesos llevaron a la atormentada
mujer a pedir ayuda a la Iglesia Católica la cuál envió a un sacerdote con
experiencia en esos asuntos. El sacerdote afirmó todo lo que la mujer decía y
planteó la necesidad de una “limpieza espiritual”
Pienso que este es uno de los temas para los
que todavía la ciencia no tiene explicación.
También está el caso de los niños llorones,
también en el País de Flandes, cuando en 1985 se produjeron varios incendios
sospechosos o misteriosos por todo el País. En esos incendios, lo único que no
sufría daño era el retrato de un niño llorando. La historia transcendió a los
medios de comunicación cuando un bombero contó la historia al periódico The Sun
que comenzó a recibir llamadas notificando casos similares.
El diario convocó a todos los poseedores de
cuadros para que lo llevaran a su sede e
hicieron una pira con todos y efectivamente no se quemaron. Los expertos dieron
su opinión de los motivos por lo cual no eran pastos de las llamas pero la
gente no entendía porque habían ocurrido 40 o quizás 50 casos similares en el
mismo período de tiempo.
Hace muchísimos años me fui a vivir en una
vivienda que tenía fama de “salir muertos”. Era un jovenzuelo y anteriormente
había vivido con los campesinos donde abunda todo tipo de historia sobre los
fenómenos paranormales. Contaban de luces que vagaban, de apariciones de
difuntos, de voces, etc. pero jamás había vivido ninguna experiencia similar.
En casa “embrujada” dormía sólo en una habitación. Había que dormir con
mosquitera pues los insectos te podían dejar sin sangre de tantos que eran. Una
noche “alguien” levantó el mosquitero. Era una anciana mujer que apenas se le
distinguía el rostro. Solamente fueron unos segundo. Bajó la mosquitera y no
sentí que se marchara. Me volteé, dando la espalda a la puerta del dormitorio y
me quedé dormido. Inexplicablemente no sentí miedo ni en ese momento ni a la
mañana siguiente cuando le pregunté a mi madre si había estado en la habitación
y me dijo que no.
Para terminar les diré que soy poco creyente
de los fenómenos paranormales en el sentido puro de la palabra. Pienso que todo
tiene su explicación, pero como le sucedía a nuestros parientes más remotos,
todavía hay cosas que nadie nos puede explicar.
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